Lo dejo cuando quiera (o no).
La noche del sábado fuimos al cine a ver la recién estrenada peli “Lo dejo cuando quiera”, una comedia española donde aparecen actores tales como Ernesto Sevilla, Cristina Castaño o Miren Ibarguren.
La peli trataba de tres profesores que prefieren dejar sus respectivos trabajos, los cuales están súper mal pagados y en los cuales no están nada a gusto, y se dedican al mundo de la noche y a ser camellos, proporcionando así pastillas que crea uno de los profesores, que es licenciado en física.
Se meten así en mundos muy turbios, donde al principio todo parece muy bonito y que proporciona muchas beneficios, y puede que eso no acabe así.
El título creo que le va genial a la peli, ya que ese “Lo dejo cuando quiera” puede que no sea del todo verdad.
Si hacemos un “análisis” más profundo podemos ver cómo la avaricia es una de las peores cosas que hay en el mundo.
Cuando tocas y te mueves entre mucho dinero, tienes afán de ganar más y más, y aunque pienses que puedes volver a la normalidad cuando tú quieras, puede que no sea así, ya que cuando estamos entre mucho diner, queremos seguir ganando y ganar mucho más.
Y esto suele ocurrir con cualquiera de los vicios que pueda tener un ser humano, que al comenzar con él se piensa que se puede dejar cuando uno quiera, que nos controlamos y que somos los únicos dueños de nosotros mismo.
Pero esto cambia cuando llegamos a los extremos, y como he dicho ya en muchas ocasiones anteriores, tocar los extremos nunca son buenos.
Y llegar a un extremo con un vicio, significa que ya dejas de ser dueño de ti mismo, para estar controlado y delimitado por ese. Es decir, tú no eliges hasta dónde vas a llegar, sino que es tu vicio el que lo controla, y en ese momento, tú libertad se ve coartada, pero coartada por ti mismo, por una cosa que tú te has provocado.
Con esto quiero decir, que hay que saber controlar y saber hasta dónde llegar, que cuando te encuentras en una situación en la que estás cómodo, como en el caso de la peli con mucho lujo, dinero y facilidades, es difícil saber hasta dónde tienes que llegar.
De esta manera, hay que mantenerse con los pies en el suelo, estes donde estes, y no olvidarse nunca de dónde vienes, por mucho lujo y dinero a los que tengas acceso sin problemas, ya que estos no te puede cegar para seguir con tú vida, y sobretodo hacerte cambiar.
Y para acabar, recordaré la frase que he comentado antes, que llegar a los extremos, pero absolutamente en cualquier cosa, es horrible.
Gracias por leerme. Siempre.
Ainoa.
La peli trataba de tres profesores que prefieren dejar sus respectivos trabajos, los cuales están súper mal pagados y en los cuales no están nada a gusto, y se dedican al mundo de la noche y a ser camellos, proporcionando así pastillas que crea uno de los profesores, que es licenciado en física.
Se meten así en mundos muy turbios, donde al principio todo parece muy bonito y que proporciona muchas beneficios, y puede que eso no acabe así.
El título creo que le va genial a la peli, ya que ese “Lo dejo cuando quiera” puede que no sea del todo verdad.
Si hacemos un “análisis” más profundo podemos ver cómo la avaricia es una de las peores cosas que hay en el mundo.
Cuando tocas y te mueves entre mucho dinero, tienes afán de ganar más y más, y aunque pienses que puedes volver a la normalidad cuando tú quieras, puede que no sea así, ya que cuando estamos entre mucho diner, queremos seguir ganando y ganar mucho más.
Y esto suele ocurrir con cualquiera de los vicios que pueda tener un ser humano, que al comenzar con él se piensa que se puede dejar cuando uno quiera, que nos controlamos y que somos los únicos dueños de nosotros mismo.
Pero esto cambia cuando llegamos a los extremos, y como he dicho ya en muchas ocasiones anteriores, tocar los extremos nunca son buenos.
Y llegar a un extremo con un vicio, significa que ya dejas de ser dueño de ti mismo, para estar controlado y delimitado por ese. Es decir, tú no eliges hasta dónde vas a llegar, sino que es tu vicio el que lo controla, y en ese momento, tú libertad se ve coartada, pero coartada por ti mismo, por una cosa que tú te has provocado.
Con esto quiero decir, que hay que saber controlar y saber hasta dónde llegar, que cuando te encuentras en una situación en la que estás cómodo, como en el caso de la peli con mucho lujo, dinero y facilidades, es difícil saber hasta dónde tienes que llegar.
De esta manera, hay que mantenerse con los pies en el suelo, estes donde estes, y no olvidarse nunca de dónde vienes, por mucho lujo y dinero a los que tengas acceso sin problemas, ya que estos no te puede cegar para seguir con tú vida, y sobretodo hacerte cambiar.
Y para acabar, recordaré la frase que he comentado antes, que llegar a los extremos, pero absolutamente en cualquier cosa, es horrible.
Gracias por leerme. Siempre.
Ainoa.
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