Adaptarse o morir

Hace unos meses, os hablé en un post de los cambios que a veces surgen en nuestra vida y de todo lo que ellos conllevan, sobre todo el sentimiento de miedo que nos hacen vivir cuando aparecen.
En este sentido, creo que hay que ser camaleónicos, hay que adaptarse a lo que venga, sin miedo a nadie ni a nadie. Ser nosotros mismo siempre, pese a todo.

Empezar de nuevo nunca ha sido fácil y nunca lo será, pero lo que si que hay que tener claro es que nunca hay que actuar, aparentar ser algo que no eres, que nunca has sido. Aunque no lo parezca, pero
lo más sencillo siempre es ser uno mismo, sentirse cómodo con la imagen das a los demás de ti.
Si en algún momento, por mínimo que sea, te da la sensación de no estar seguro de que lo que transmites es lo que quieres transmitir, es porque algo no estás haciendo bien, te estás equivocando en algún aspecto. Así que yo siempre he pensado que cuando hay algo que no te gusta y está en tu mano poder cambiarlo, no hay que dudar ni un segundo en hacerlo, siempre que así te sientas mejor contigo mismo.

En estos casos, otra cosa que hay que recordar siempre es de donde venimos. Sí, de donde venimos. Aunque parezca mentira, pero algo tan simple como eso muchas veces lo olvidamos. Olvidamos nuestras raíces, todo lo que hemos luchado para llegar a donde estamos, y eso es lo peor, ya que cuando estas en la cumbre de algo, cuando llegas a lo más alto, es gracias a eso mismo, al lugar del que provienes.

Tampoco hay que olvidar que, muchas veces los cambios en nuestra vida llegan porque los decidimos nosotros, o porque simplemente hay que experimentarlos para llegar hasta donde queremos llegar, a nuestra mete, a alcanzar un sueño.
Nadie nunca dijo que los cambios y los caminos que tenemos que seguir fuesen fáciles, de hecho nunca lo han sido. Para cambiar, tienes que dejar muchas cosas atrás. Pero creo que es más fácil asumir los cambios si los tomas con ganas, con iniciativa y con ilusión, pensando que todo ello lo haces para llegar a algún sitio, a ese sitio donde sueñas llegar algún día, al que algún día seguro que consigues llegar.

Como he dicho antes nunca han sido fáciles, pero cada vez me doy más cuenta que el ser humano es un ser extremadamente fuerte, y que aunque parezca que no, aunque a veces se nos hagan un mundo, que de un granito de arena hagamos una montaña enorme, siempre, siempre conseguimos adaptarnos a todo.
Porque como decía Charles Darwin: "No sobreviven las especies más fuertes ni las más inteligentes, sino las que mejor saben adaptarse a su entorno". Así que ya sabéis, adaptarse o morir.

Gracias por leerme. Siempre.
Ainoa.

Comentarios

Entradas populares